Casi 2.000 médicos y dentistas fueron suspendidos de empleo por trabajar de forma irregular en Italia, al no estar vacunados contra el coronavirus, informó este viernes la Federación Nacional de las Órdenes de Médicos, Cirujanos y Dentistas (Fnomceo).
En total fueron 1.972 los facultativos suspendidos, el 0,4 % del registro de médicos y dentistas italianos, aunque la federación estima que la cifra real de los profesionales sanitarios que no están vacunados se elevaría a un 7,2 %, indicó la organización en un comunicado.
Sin embargo, ese 7,2 % es «un dato en bruto que no refleja la situación real de los trabajadores sanitarios que incumplen la ley, ya que incluye, por ejemplo, a los compañeros que no pueden vacunarse o que tienen que posponer la dosis por motivos de salud», explicó el presidente de la Fnomceo, Filippo Anelli.
Tras recibir el aviso de suspensión, los profesionales tendrán cinco días para acreditar su vacunación, el certificado de exención o la reserva de la dosis, que deberá suministrarse en los siguientes 20 días.
A pesar del alto número de médicos no vacunados, que se elevaba a 60.000 a fecha del 20 de diciembre, esa cifra actualmente se ha reducido a la mitad, lo que muestra «que muchos han comunicado estar en regla», es decir, esperando la dosis o con una excepción médica.
Aunque «la suspensión no es disciplinaria sino declarativa», recordó Anelli, «si se detectasen infracciones deontológicas, como la difusión de mensajes contra las vacunas», la organización abriría expedientes sancionadores.
El presidente de Fnomceo hizo hincapié en que a pesar de que el cese del trabajo de estos profesionales suponga una gran carga para los centros de salud, el objetivo de estas sanciones es «proteger la salud pública».