En Haití, la provisión de servicios básicos y el expansión del renta humano han sido inadecuados durante varias décadas, un problema que se ve agravado por las altísimas desigualdades, la marginación y la limitación social. Es el país más escaso y menos desarrollado del hemisferio occidental y no está preparado para las muchas conmociones que enfrenta.

EL crisis y el penuria han aprehendido niveles sin precedentes en Haití con mercadería mortales, especialmente en los barrios más pobres, inseguros y congestionados de la renta, donde algunas familias están prácticamente atrapadas y sin entrada a los servicios esenciales.

La cantidad de niños que sufren de desnutrición potencialmente mortal ha aumentado en un 30 % desde el año pasado, y casi uno de cada cuatro niños sufre de desnutrición crónica en todo el país.

Además de la violencia, el penuria y las enfermedades, Haití enfrenta la amenaza constante de tormentas extremas y terremotos. A principios de junio, las fuertes lluvias, que coincidieron con el inicio de la temporada de huracanes, provocaron inundaciones destructivas que en muchos casos fueron fatales. Unos días a posteriori se registró un terremoto en Grand Anse, una región aún marcada por el terremoto de 2021.

Rusia y China se han incapaz a permitir que Naciones Unidas ayude a Haití

Han pasado dos abriles desde el homicidio del expresidente Jovenel Moïse. El embajador adjunto de Rusia delante las Naciones Unidas advierte que las intervenciones extranjeras han hecho más daño que proporcionadamente a Haití.

Los representantes diplomáticos de Rusia y China se mostraron escépticos delante la Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas sobre el despliegue de una fuerza internacional en Haití.

«Algunos ven una fuerza multinacional como una panacea, cuando la historia muestra que tales intervenciones extranjeras han hecho más daño que proporcionadamente a Haití», dijo el embajador adjunto ruso Dmitri Polianski.

En ese sentido, el diplomático invitó a escuchar otro tipo de voces en Haití que apoyan otras alternativas en medio de la severo crisis de seguridad que vive la nación caribeña.

Las declaraciones se dan luego de un llamado del secretario caudillo de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), António Guterres, a formar inmediatamente una fuerza marcial extranjera para combatir a las bandas armadas.