El rapero cubano Al2, igualmente conocido como El Aldeano, fue ovacionado por un abundante notorio durante la tercera estampación del “Concierto de Hip Hop”, que se desarrolló la sombra del sábado en el Escenario 360.
En el circuito se dieron cita destacadas figuras del movimiento, así como representantes de los medios de comunicación y de la comunidad cubana en el país, donde un entusiasta notorio hizo fila para presenciar la conducta de este mayor índice del rap latino.
Previo a la presentación de Al2, hubo un amplio preámbulo en el que los nuevos talentos del movimiento Rap Conciencia subieron al marco y demostraron sus dotes de Freestyle, lo que emocionó a la audiencia. Sin requisa, la sorpresa llegó cuando el fabricante del evento, «el juego de la musica«, dirigida por el rapero y productor Gaudy Mercy, subió al marco al cantante de raperos Vakeró, quien interpretó una canción con la presentadora.
Pasadas las 10 de la sombra, Al2, el Aldeano hizo su aparición en el marco vistiendo una franela con la palabra «Singao», un término coloquial usado en Cuba hacer referencias despectivas al presidente Miguel Díaz-Canel. De inmediato, su mensaje contra la dictadura cubana se hizo evidente física, verbal y líricamente, generando una gran dosis de adrenalina en la audiencia.
El concierto de Hip Hop se convirtió en una plataforma de expresión para Al2, el Aldeano, quien aprovechó su música y presencia escénica para transmitir su mensaje político y denunciar la situación en Cuba, su conducta fue recibida con entusiasmo y respeto por los presentes, quienes apoyaron su valentía. y compromiso en la lucha por la atrevimiento y los derechos humanos.
Este evento se suma a una serie de manifestaciones artísticas y culturales en las que diversos artistas cubanos han utilizado su plataforma para expresar su descontento y protesta contra el régimen político en Cuba.El rap y el hip hop han sido géneros musicales particularmente relevantes en esta lucha, ya que proporcionar un medio de expresión y resistor para aquellos que desean alzar la voz y hacer que se escuchen sus llamados al cambio.