Un simple chicle y agua tibia revelaron que el Santo Cristo de Lepanto, la imagen más venerada de la catedral de Barcelona, no es en efectividad un Jesús enojado.
Según ha anunciado el conservador de la Catedral de Barcelona prórroga EFEla pátina oscura del Cristo era en efectividad suciedad acumulada.
También se ha revelado que la figura icónica de Jesús no es del siglo XVI, sino una obra flamante del siglo XIII.
Según la restauradora Ana Ordóñez, la capa de suciedad de la imagen estaba formada por humo, pintura y hollín. Debajo se escondía una antigua policromía del siglo XIX, la más fresco de la imagen ayer de oscurecerse por factores externos.
Aunque la imagen era blanca en el siglo XIX, en el imaginario colectivo contemporáneo de la renta catalana el Cristo de Lepanto es enojado, el conservador de patrimonio y canónigo de la Catedral de Barcelona, Roberto Baró, motivó la intrepidez de restaurar a su apariencia flamante, es asegurar, a «blanquearlo». A su pleito, por el poco tiempo que, en términos históricos, el panorama se ha oscurecido.
El «nuevo» Cristo de Lepanto
«Se pudo resaltar que la policromía no solo estaba aceptablemente conservada sino que era de altísima calidad», dijo el curador, quien igualmente destacó la oportunidad de recuperar su color antecedente, ya que «el ennegrecimiento de la estancia se produce durante el siglo XX». siglo.» .
Preguntado por el impacto que generará en los fieles de este icono, que siempre han conocido la imagen oscurecida, aseguró que quedarán «sorprendidos». Aunque paciencia que se enamoren del nuevo look con el tiempo.
Según la tradición, el Santo Cristo de Lepanto de Barcelona estuvo en el buque insignia de la batalla de Lepanto de 1571, que impidió el avance de los turcos en Europa. Su distintiva inclinación corporal se atribuye a que esquiva una bala. También porque cubrió una brecha en el barco.