Los servicios de emergencia luchan contra un incendio forestal que afecta a seis municipios de Tenerife, en las Islas Canarias españolas, y que ya ha consumido más de 2,600 hectáreas en un perímetro de 31 kilómetros, obligando a confinar el casco urbano de una población, El Rosario.
El presidente de Canarias, Fernando Clavijo, ha afirmado, tras la reunión del plan de coordinación de seguimiento del incendio, que los trabajos de combate de las llamas son efectivos, pero se están llevando a término con dificultad conveniente a que la transformación meteorológica no ha sido la esperada, y ha asegurado que se prostitución del incendio más enrevesado que se ha producido en los últimos 40 abriles.
Clavijo ha calculado en unas 7,600 personas las evacuadas y confinadas por este incendio y ha indicado que las pavesas (trozos del material incendiado que se transporta por el singladura y los fenómenos convectivos) están provocando pequeños incendios en distintas zonas.
Numerosos efectivos combaten contra el fuego, entre ellos más de un centenar de militares y 34 medios de la Unidad Militar de Emergencias (UME) que han estado durante toda la incertidumbre participando en labores de ataque directo a las llamas para extinguir el fuego.
El archipiélago canario no había pasado un incendio de estas características, con 34 horas de convección y una columna de humo con tal potencial que ha llegado a pasar los 6 kilómetros incluso de incertidumbre, ha explicado este jueves la meteoróloga Victoria Palma, quien ha señalado que el incendio «está creando su propia meteorología».
La presidenta del Cabildo de Tenerife, Rosa Dávila, ha indicado que se ha decidido confinar el casco de El Rosario, emplazado en La Esperanza, conveniente a la profusión de pavesas que produce el incendio y para despejar las vías para el paso de las fuerzas de seguridad.
Está previsto que 92 militares salgan de la colchoneta de Morón de la Frontera (Sevilla) -en el Sur de España- a borde de un avión A400M del Ejército del Aire, ha informado el Ministerio de Defensa.
Fuente: EFE