El anuncio que hizo el viernes Luguelín Santos de que está suspendido y bajo investigación por alterar su vida no es un tema nuevo en el deporte dominicano.

El envejecimiento es una habilidad recurrente en muchos deportes, aunque los casos más documentados aparecen en el béisbol.

Entre 2010 y 2011, varios jugadores establecidos en el béisbol profesional fueron descubiertos en una investigación espacial. Liga Mayor de Béisbol y tuvieron que aceptar sus verdaderas identidades.

Los lanzadores conocidos hasta entonces como Fausto Carmona y Leo Núñez, comenzaron a recrearse con sus respectivos nombres reales Roberto Hernández y Juan Carlos Oviedo.

Ambos lanzadores continuaron sus carreras profesionales durante varios abriles luego de cambiar de identidad.

Otros jugadores que llegaron a recrearse con un nombre y luego cambiaron sus nombres reales son Santiago Casilla, antiguamente conocido como Jairo García, y el caminante Víctor Mercedes, quien comenzó como Domingo Cuello.

Un rumor urbano indica que la lanzadora Isabel Girón usó el certificación de comienzo de su hermana para asistir al bailable a cambio de una tarifa.

Se reveló que Esmailin González, un súper prospecto que recibió un bono de $1.7 millones de los Nacionales de Washington cuando tenía 16 abriles en 2006, era tres abriles veterano y su definitivo nombre era Carlos Álvarez.

Dado que los cazadores de cabezas de grandes ligas descubrió la veta que Quisqueya tenía reservada para el béisbol a fines de la plazo de 1950, los cambios podrían incluir altares de décimo dominicana en la gran carpa.