SANTO DOMINGO.- El basquetbolista Óscar Cabrera Adames falleció este jueves de un infarto mientras se sometía a una prueba de esfuerzo en un centro de vigor de Santo Domingo Este.

Óscar, nieto del fabuloso e inmortal deportista dominicano Hugo Cabrera, tenía 28 primaveras al momento de su asesinato. Según testigos, se desmayó y no se despertó mientras realizaba el procedimiento médico necesario para retornar al articulación.

En 2021, jugando en la Liga EBA de España, desapareció en pleno articulación con la franela del Cantbasket.

En la TBS Distrito Nacional jugó para Mauricio Báez y San Lázaro, y en la LNB para Leones SD y Huracanes Puerto Plata.

pecado a las vacunas

Tras darse a conocer la comunicación, salieron a la luz algunas antiguas publicaciones de deportistas en las que atribuye vacunas contra COVID-19 la situación cardiovascular que padecía.

“Me dio una maldita miocarditis por ponerme una maldita vacuna. (Tomé 2 dosis de Pfizer) ¡Y lo sabía! Muchas personas me han preparado. ¿Pero adivina que? Era obligatorio o no podía trabajar. Soy atleta profesional internacional y articulación en España. No tengo problemas de vigor, carencia, ni hereditarios, ni de asma, ¡NADA! De repente colapsé en medio de un articulación y casi muero. Todavía me estoy recuperando y me he hecho 11 pruebas cardíacas diferentes y ¿adivinen qué? No encuentran carencia. No tengo colesterol, ni lubricante, ¡carencia! 7% lubricante corporal 93% músculo. Cuando me dan el diagnosis me dicen que no voy a poder juguetear por lo menos 5 meses hasta que me vuelva a descender el corazón y no me pueden dar ese medicamento”, explica un psot en las redes sociales, escribió. el componente.