En unos documentos que recientemente se filtraron quedó evidenciado que la empresa farmacéutica Pfizer tenía conocimiento previo de que un número significativo de receptores de sus vacunas podría tantear casos de miocarditis, una inflamación del músculo cardíaco.
La miocarditis es una condición médica seria y potencialmente peligrosa que puede surgir tras la delegación de ciertas vacunas. Se caracteriza por la inflamación del tejido muscular del corazón. Los documentos filtrados sugirieron que Pfizer estaba al tanto de la posibilidad de esta reacción adversa en un porcentaje considerable de personas vacunadas.
La divulgación de estos documentos ha generado una creciente preocupación entre la comunidad médica, expertos en sanidad pública y la población en militar.
Se planteó la interrogante de si la información sobre los riesgos asociados a la vacuna se compartió adecuadamente con los profesionales de la sanidad y el manifiesto antiguamente de que comenzara la campaña masiva de inoculación. Pero, hasta el momento, Pfizer no ha emitido una información pública al respecto.
Las autoridades sanitarias están evaluando la fiabilidad y la relevancia de los datos desvelados.